¿Cuándo empiezan a contar los 6 meses de ERTE?

Los 6 meses de ERTE son un tema importante a tener en cuenta en estos tiempos de incertidumbre laboral. Para saber cuándo empiezan a contar estos meses, es necesario entender primero qué es un ERTE.

Un ERTE es una medida que una empresa puede tomar para suspender temporalmente los contratos de sus trabajadores debido a causas económicas, técnicas, organizativas o de producción. Durante este periodo, los trabajadores afectados por el ERTE reciben una prestación por desempleo.

Los 6 meses de ERTE se refieren al tiempo máximo que un trabajador puede estar en esta situación y recibir la prestación por desempleo. A partir de los 6 meses, el trabajador corre el riesgo de perder esta ayuda económica.

Es importante tener en cuenta que los 6 meses de ERTE empiezan a contar desde el primer día en que el trabajador esté en situación de suspensión temporal de su contrato debido a un ERTE. Es decir, si un trabajador empieza un ERTE el 1 de mayo, los 6 meses de ERTE empezarán a contar desde ese día.

En definitiva, es fundamental que los trabajadores afectados por un ERTE entiendan cuándo empiezan a contar los 6 meses y estén al tanto del plazo existente para mantener la prestación por desempleo.

¿Cuánto se cobra en un ERTE después de 6 meses?

Un ERTE o Expediente de Regulación Temporal de Empleo es una medida que se toma en tiempos difíciles, como una crisis económica, una pandemia o una situación que afecte a la empresa, que permite la suspensión temporal del contrato laboral de los trabajadores afectados.

Si has sido incluido en un ERTE, después de seis meses deberás recibir una prestación económica conocida como prestación por desempleo. Esta prestación se calcula en función de la base reguladora de la nómina, aunque se aplicarán ciertos límites.

El importe máximo de la prestación por desempleo será el 70% de la base reguladora los primeros 180 días, y luego se reduce al 50%. Además, existen límites máximos y mínimos de la prestación que se deben aplicar dependiendo de la situación económica del trabajador.

Es importante tener en cuenta que durante los primeros 180 días, se cobrará en función de la base de cotización del trabajador, aunque nunca podrá superar el importe máximo establecido. Además, es importante estar al tanto de la duración máxima de la prestación, que actualmente se encuentra en 24 meses.

En conclusión, después de seis meses incluido en un ERTE, el trabajador deberá recibir una prestación por desempleo que dependerá de la base reguladora de su nómina y otros factores determinados por la situación personal de cada trabajador.

¿Cuánto tiempo tiene que pasar para despedir después de un ERTE?

Un ERTE es un Expediente de Regulación Temporal de Empleo y en algunas situaciones, puede ser la única opción que tienen las empresas para sortear momentos económicos complicados. Sin embargo, muchas personas se preguntan cuánto tiempo tiene que pasar para despedir después de haber hecho uso de este mecanismo.

Uno de los propósitos de un ERTE es que la empresa pueda mantener a su plantilla a pesar de una situación temporal de falta de trabajo o ingresos. Por lo tanto, lo más lógico es que una vez que se ha recuperado la actividad económica y se ve el flujo de demanda, la empresa haga lo posible por adaptar sus recursos y volver a la normalidad, por lo que [no] sería necesario despedir a nadie.

Ahora bien, hay situaciones en las que la empresa realmente no tiene más alternativa que proceder a los despidos. En ese caso, es importante tener presente que el ERTE no es una barrera [en absoluto] para llevar a cabo los despidos, pero sí que establece una serie de condiciones y procedimientos que la empresa deberá cumplir para despedir.

Por lo tanto, no existe una respuesta única a la pregunta de cuánto tiempo tiene que pasar para despedir después de un ERTE. La clave está en que la empresa deberá cumplir ciertas formalidades y requerimientos legales establecidos por la ley laboral y el poder judicial para poder llevar a cabo el despido.

¿Cómo se cuentan los días de un ERTE?

Los días de un ERTE son contados de una manera muy específica. Cuando un trabajador se encuentra en una suspensión temporal de empleo, es importante conocer cómo se cuentan los días para no perder ningún derecho o prestación.

En primer lugar, es necesario tener en cuenta que los días se cuentan desde el comienzo de la suspensión, es decir, desde el primer día en el que el trabajador deja de prestar sus servicios en la empresa. Es importante tener en cuenta esta fecha para calcular el final del ERTE y el tiempo que el trabajador va a estar en esta situación.

Además, es importante destacar que los días incluyen también fines de semana y festivos. Por tanto, si un trabajador ha sido incluido en un ERTE desde un viernes, el primer día de suspensión será ese mismo día y los fines de semana también contarán como días de suspensión.

Por otro lado, es necesario tener en cuenta que los días de un ERTE son días naturales, es decir, se cuentan todos los días del mes, independientemente del número de días que tenga cada mes. Si un trabajador ha sido incluido en un ERTE el día 15 de mayo, su último día de suspensión será el día 14 de junio.

En resumen, para calcular los días de un ERTE, se deben tener en cuenta la fecha de inicio de la suspensión de empleo, incluyendo los fines de semana y festivos y contabilizando todos los días naturales del mes. Es importante tener en cuenta esta información para no perder ningún derecho durante el tiempo de la suspensión.

¿Cuántas prórrogas de ERTE ha habido?

Desde el inicio de la crisis sanitaria, el Gobierno español ha implementado diversas medidas para reducir el impacto económico en las empresas y trabajadores afectados por el COVID-19. Una de las medidas más destacadas ha sido la implementación de los ERTE (Expedientes de Regulación Temporal de Empleo), que permiten a las empresas suspender los contratos laborales temporalmente y reducir la jornada laboral.

Estos ERTE han pasado por varias prórrogas desde su implementación en marzo de 2020. La primera prórroga se anunció el 28 de mayo de 2020, y se extendió hasta el 30 de junio. Luego, se anunció una segunda prórroga que se extendió hasta el 30 de septiembre.

En octubre de 2020, se anunció una tercera prórroga, que se extendió hasta el 31 de enero de 2021. Además, se incluyó una nueva modalidad de ERTE denominada "ERTE de impedimento", que permite suspender los contratos de trabajo de los trabajadores que estén en cuarentena o confinamiento debido al COVID-19.

Más recientemente, en enero de 2021, se anunció una cuarta prórroga de los ERTE, que se extendería hasta el 31 de mayo de 2021. En esta prórroga se incluyó una nueva modalidad de ERTE denominada "ERTE de limitación", que permite a las empresas reducir la jornada laboral y suspender los contratos de trabajo de sus empleados en situaciones de restricciones por COVID-19.

En conclusión, desde marzo de 2020 hasta mayo de 2021, se han implementado cuatro prórrogas de los ERTE, lo que ha permitido a muchas empresas y trabajadores mitigar el impacto económico causado por la pandemia del COVID-19.

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